9 de diciembre: Día Mundial de la Informática. Grace Hooper cambió el código del mundo.

9 de diciembre: Día Mundial de la Informática

Grace Hooper cambió el código del mundo

 por Eduardo Rodas, Médico y Periodista Científico, 9 de diciembre de 2025 

Cada 9 de diciembre, el mundo celebra el Día Mundial de la Informática, un reconocimiento a la disciplina que ha redefinido el curso del siglo XXI. Sin embargo, esta fecha no fue elegida al azar. Es un tributo directo a una de las figuras más influyentes de la era digital: la pionera de la programación Grace Murray Hopper, nacida en Nueva York en esta misma fecha en 1906.

Grace Murray Hooper

La informática, cuyo término proviene de la contracción alemana de "information" y "automatic" (informatik, acuñado por Karl Steinbuch en 1959), es la rama de la ciencia dedicada al estudio y procesamiento automático de datos digitales. Su impacto se hizo palpable y crítico durante eventos recientes como la pandemia de 2020, donde la conectividad y la transmisión de datos se convirtieron en el eje de la vida global. Pero el camino hacia esta revolución se pavimentó con las innovaciones de visionarios como Hopper.

De la academia al "Monstruo" de Harvard

Grace Hopper fue una académica brillante desde sus inicios. Hija de un ingeniero civil y una madre amante de las matemáticas, su educación temprana en escuelas privadas y su estricta formación en lectura, escritura y las ciencias básicas sentaron las bases de su futuro. Continuó su camino en Vassar College, se casó con Vincent Hopper y en 1934 obtuvo un Ph.D. de Yale, un logro inusual para una mujer de su época, y continuó enseñando en el Departamento de Matemáticas de Vassar.

El estallido de la Segunda Guerra Mundial cambió su rumbo. En 1943, se alistó en la Reserva Naval de los EE. UU. (USNR). Al graduarse, fue asignada al Proyecto de Computación del Departamento de Municiones en la Universidad de Harvard. Fue allí donde comenzó su leyenda, ayudando a programar la Mark I, la primera computadora digital de gran escala. Este dispositivo, realización conceptual de los sueños de Charles Babbage, fue el primer "monstruo" que Hopper ayudó a "domar".

El origen del "Debugging"

Su etapa en Harvard no solo fue crucial por su trabajo en la Mark I, Mark II y Mark III, sino que también fue el escenario del nacimiento de uno de los términos más universales de la computación: el "debug" (depurar).



En un caluroso día de 1945, mientras trabajaban en un edificio sin aire acondicionado, la Mark II se detuvo. Al investigar la falla en un disyuntor, el equipo de Hopper encontró la causa: una polilla muerta. Bug significa un bicho en inglés. Retiraron el insecto y lo pegaron con cinta adhesiva al cuaderno de notas. A partir de ese momento, la respuesta a la pregunta de si estaban ejecutando alguna tarea era a menudo: "Estamos depurando" (debugging) la computadora.

COBOL: La máquina habla el idioma de los negocios

Tras su trabajo en la Marina, Hopper se unió a la Ekert-Mauchly Computer Corp., donde se estaba construyendo la UNIVAC I, la primera computadora digital de gran escala comercial. Fue aquí donde comenzó su esfuerzo más significativo: las técnicas pioneras de programación y la creación de compiladores.

Hopper se dio cuenta de que muchos programas usaban conjuntos idénticos de instrucciones que podían ser pre-almacenadas y reutilizadas (subrutinas). Publicó su primer trabajo sobre compiladores en 1952. Su argumento era simple pero revolucionario: había que dejar que la computadora hiciera el trabajo tedioso de copiar y pegar código, eliminando el error humano y la duplicación de esfuerzos.

Su idea más trascendental llegó en 1959, cuando el Departamento de Defensa patrocinó el Comité de Lenguajes de Sistema de Datos (Codasyl). Hopper fue una fuerza motriz en el desarrollo del COBOL (Common Business Oriented Language). El objetivo era crear un lenguaje de programación que fuera independiente de cualquier fabricante de hardware y que fuera específicamente adecuado para el procesamiento de datos en los negocios. El COBOL, gracias a la visión de Hopper, se convirtió en el primer lenguaje que permitía a los programadores comunicarse con la computadora utilizando palabras en inglés en lugar de códigos matemáticos complejos, abriendo la puerta a la adopción masiva de la informática en la industria y el comercio. Grandes sistemas de información bancaria, por ejemplo, siguen funcionando todavía con el sistema de programación en COBOL.

Un legado imborrable

Hopper continuó trabajando en la estandarización de lenguajes de computación, una batalla que, según ella, era vital para evitar el "despilfarro" de millones de dólares en conversiones innecesarias de programas. Fue una conferencista popular y enérgica hasta su retiro de la Armada en 1986, a la edad de 79 años.

Al mirar atrás en sus cuatro décadas de trabajo pionero, Hopper sentía que su mayor contribución no eran sus premios o logros técnicos, sino "toda la gente joven que había entrenado". Su vida de servicio y dedicación fue reconocida póstumamente en 2016, cuando recibió la Medalla de la Libertad de manos del presidente Barack Obama.

Grace Murray Hopper, la mujer que aprendió a programar la primera gran computadora digital y que enseñó a las máquinas a hablar el lenguaje humano, transformó una disciplina que parecía esotérica en una herramienta global. Su cumpleaños, el 9 de diciembre, es la fecha perfecta para recordar que detrás de cada clic, cada aplicación y cada línea de código, hay una pionera que hizo posible la era digital.

Su vida de logros nos recuerda que las mentes pioneras son la verdadera fuerza motriz detrás del código que da forma a nuestro mundo.


Comentarios

Entradas más populares de este blog

Reconocimiento a médicos argentinos por su labor humanitaria y científica

La marcha irlandesa que se convirtió en el Himno del Club Atlético River Plate

¿Tierras raras: a dónde van y de dónde vienen?